Según la Sociedad Española de Alergología, la alergia se trata de un problema que padecen un 20 por ciento de los españoles (unos ocho millones de personas). En términos médicos las alergias se corresponden con una respuesta desproporcionada del sistema inmune a algún tipo de estímulo externo concreto. La alergia puede condicionar y afectar de manera seria la vida del que la sufre, por este motivo es indispensable diagnosticarla, tratarla y medicarse de forma correcta para combatirla.
Las reacciones alérgicas las desencadenan los alérgenos, estos alérgenos pueden ser partículas que hay en el aire que respiramos como polen o polvo, agentes químicos con los que entramos en contacto, alimentos, etcétera.
Alergias más comunes
Sin duda la alergia más frecuente es la rinitis. Se trata de una alergia estacional que suele aparecer en febrero terminando por remitir en julio, siendo su desencadenante el polen de las plantas. No todos los enfermos la padecen con igual intensidad pero lo que si que es cierto es que no resulta sencillo combatirla ya que es difícil evitar entrar en contacto con el alérgeno que la produce.
Otras alergias bastante comunes son las de tipo cutáneo que suelen aparecer en forma de sarpullido, urticaria, eczema, erupción, eritema o irritación. Los alérgenos responsables de este tipo de alergias suelen ser el clima, el sol y los productos de cosmética (por eso es recomendable utilizar cosméticos naturales).
Por otro lado, la alergia a los alimentos, la alergia a medicinas y medicamentos y el asma, son otro tipo de alergias que, sin ser tan frecuentes como las anteriores, pueden llegar a ser peligrosas y afectar notablemente a la vida de los pacientes que las sufren.
Medicinas, medicamentos y fármacos contra la alergia
Los fármacos y medicinas son la manera más común de tratar una alergia. Estos tratamientos deben ser siempre prescritos por el médico. Un ochenta por ciento de los alérgicos han seguido alguna vez un tratamiento para luchar contra su alergia, no en vano, existen medicamentos que se demuestran bastante eficaces en el tratamiento de la enfermedad, sobre todo porque consiguen contrarrestar los síntomas de la misma.
Algo que resulta imprescindible para luchar contra la alergia es cambiar los hábitos y evitar entrar en contacto con los alérgenos y sustancias que desencadenan la enfermedad.
Información estadística sobre la alergia
Los hombres son menos propensos a sufrir alergia que las mujeres, y las personas maduras menos que las jóvenes. La primera manifestación de que uno es alérgico a algo se suele producir entre los 22 y 28 años, aunque en el caso del asma la enfermedad suele aparecer durante la infancia.
La predisposición genética a sufrir alergia es evidente ya que aquellos que la padecen suelen tener antecedentes familiares de personas que también la sufren en su familia.
Recomendaciones y medidas preventivas para evitar una crisis alérgica
Nuestra primera recomendación es siempre, de tener síntomas alérgicos, acudir a un médico especialista para que diagnostique que tipo de alergia sufrimos y que nos ponga el tratamiento adecuado a la misma, como ya hemos señalado los tratamientos existentes son bastante eficaces.
De cualquier forma os daremos también una serie de recomendaciones y acciones preventivas que pueden evitar que suframos una crisis alérgica, cobre todo en primavera:
- No salir a la calle en los momentos en que la polinización es máxima.
- Cerrar puertas y ventanas durante esas horas.
- Evitar secar la ropa al aire libre.
- Utilizar gafas de sol al salir al exterior.
- La utilización de ventiladores, tanto en el coche como en casa, tampoco es recomendable ya que introducen el aire del exterior y con él las partículas de polen.
1 comentarios :
Yo he seguido todos los tratamientos que existen y mi alergia al polvo no mejora, pero por lo menos he conseguido sobrellevarla mejor.
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