El prolapso genital o prolapso vaginal es el descenso de ciertos órganos pélvicos (vejiga, útero o recto) a través de la vagina. Esta enfermedad,” tabú”, durante muchos años, no es una enfermedad excepcional, sino que por el contrario la mujer tiene un 11% de probabilidad de sufrirla a lo largo de su vida.
Su aparición se debe en la mayor parte de los casos a partos múltiples o dificultosos, la menopausia, o el estreñimiento crónico, provocando la debilidad o pérdida de calidad de los tejidos vaginales y del soporte pélvico.